La capacitación laboral es, reconocidamente, una eficaz herramienta para mejorar la eficiencia del RRHH de las empresas, lo que reviste especial importancia en épocas de crisis. En Chile, las empresas gozan de un subsidio de capacitación equivalente al 1% de su planilla anual de remuneraciones, monto que en muchas ocasiones es sub-utilizado e incluso “mal utilizado”, cuando no se destina a satisfacer los reales requerimientos de las empresas. Lo anterior, muchas veces ocurre por desconocimiento de los procedimientos de la franquicia tributaria y por la falta de personal calificado en procesos de capacitación laboral. El cargo de “Encargado Interno de Capacitación” requiere de personas con determinadas competencias funcionales, aunque también deben desarrollar competencias transversales, especialmente en materias comunicacionales y liderazgo.